Como resultado del rápido desarrollo industrial
en el siglo XIX, muchos empleadores lograron beneficios a partir de la
explotación de los obreros. Los campesinos sin educación migraron en
masa a las ciudades en búsqueda de trabajo en las fábricas y terminaron
en ambientes precarios, a menudo trabajando por salarios miserable. Los
sindicatos comenzaron en el Reino Unido como una forma de agrupar a los
trabajadores y lograr la equidad por ellos mismos. Como la única
herramienta de negociación que tenían era su propio trabajo, se
abstenían de trabajar en forma de "huelga", lo cual fue efectivo para
lograr los cambios necesarios en sus lugares de trabajo. El movimiento
de los sindicatos se distribuyó por todo el mundo en las siguientes
décadas, e incluso, ingresó en la política. Los sindicatos, como
mecanismos del cambio, se aliaron con las tendencias políticas de
izquierda, y en general siguen las mismas tendencias.
Ventajas
Los sindicatos pueden ayudar a sus miembros a negociar de forma colectiva los salarios y beneficios de forma más efectiva de lo que podrían hacerlo los individuos por sí mismos. Un trabajador tiene una mínima posibilidad de éxito cuando va a pedir un aumento a su jefe, sino que probablemente será despedido, en especial durante el siglo XIX, por hacer semejante pedido que perjudicaría las ganancias del empleador. Los sindicatos, sin embargo, pueden hacer los mismo pedidos y tener el beneficio de representar a toda la fuerza laboral, con una mayor posibilidad de éxito.
Garantías
Las prácticas laborales deben
escribirse en forma de leyes en la mayoría de los países, y ésto hace
que una huelga de un sindicato sea un proceso legal, asegurando que el
empleador no puede despedir a un empleado por hacer huelga. Las huelgas
en general se resuelven rápidamente, ya que los empleadores se dan
cuenta que las pérdidas producidas por la huelga aumentarán los costos, y
que una solución es lo mejor para todas las partes involucradas. En
algunos países, los sindicatos cuentan con la protección legal que
defiende sus derechos en caso de un despido injusto. Los sindicatos se
crearon para promover el nivel de vida y las perspectivas laborales de
los trabajadores, y para este fin, los sindicatos aportan una
capacitación especial a sus miembros. A veces ofrecen cursos nocturnos
para que los obreros avancen en su campo laboral, o cursos comunitarios
como de primeros auxilios o prácticas de seguridad laboral.
Mano de obra barata en el extranjero
Otra desventaja de la
agitación provocada por los sindicatos es que el trabajo puede
eventualmente mermar. Los salarios irreales fomentan que los empleadores
o reduzcan la cantidad de operarios o decidan tercerizar la producción a
otros países donde los sindicatos no están involucrados en el proceso
de manufactura. Esta confrontación ha producido una atmósfera divisoria
entre "ellos" y "nosotros" en muchos lugares de trabajo, en lugar de
fomentar la confianza y la cooperación.
Despidos injustos
Las leyes contra los despidos
injustos tienen una contra también, ya que pueden usarse para proteger
los puestos de trabajo de empleados incompetentes o deshonestos que
deberían ser despedidos. La ley también puede tener el efecto opuesto de
reducir el empleo, como se ha observado en las leyes de Australia desde
los años 70s y las leyes federales de los Estados Unidos en los 90s, en
donde los empleadores dudan de contratar nuevo personal porque
quitarlos de su puesto por incompetencia sería muy costoso.
Desventajas
Hay momentos en que los
salarios necesitan aumentarse y ser equitativos, pero el poder de los
sindicatos a veces eleva los salarios y beneficios a niveles irrealmente
altos. Estos niveles pueden superar a lo que el mercado puede sostener,
lo cual causa el aumento de los costos de fabricación de los objetos
que se producen. El efecto contrario al aumento de salario se hace notar
en que los costos se trasladan a través de toda la cadena hasta el
usuario, que inevitablemente, es el trabajador representado por el
sindicato. Las huelgas también hacen que los miembros un sindicato
parezcan codiciosos, en especial si tienen un trabajo bien pago en
comparación con otros trabajadores. Pero todo se puede arreglar en las Negociaciones.